Éster de almidón de maíz y glicerina. Ideal para la elaboración de geles y serums en frío. El glicerolado de almidón aporta una textura aterciopelada, contribuyendo a aumentar la viscosidad y estabilidad en las formulaciones cosméticas. Es un producto de empleo muy tradicional, brindando humectación y formando un delicado film protector y absorbente de humedad sobre el epitelio. Da una sensación lubricante y de mejora en el deslizamiento, permitiendo aplicar el producto de forma agradable, dejando una sensación de frescura inmediata.
Éster de almidón de maíz y glicerina. Ideal para la elaboración de geles y serums en frío. El glicerolado de almidón aporta una textura aterciopelada, contribuyendo a aumentar la viscosidad y estabilidad en las formulaciones cosméticas. Es un producto de empleo muy tradicional, brindando humectación y formando un delicado film protector y absorbente de humedad sobre el epitelio. Da una sensación lubricante y de mejora en el deslizamiento, permitiendo aplicar el producto de forma agradable, dejando una sensación de frescura inmediata.